La cola que mueve al perro

A fines de los noventa, “privatizar” se convirtió en una mala palabra. Desde entonces, en el imaginario colectivo se le asocia con la corrupción del gobierno de Fujimori, y con tratos hechos bajo la mesa por Montesinos y sus secuaces. Poco importa que no haya evidencia de que el valor de los activos vendidos hayaSigue leyendo «La cola que mueve al perro»